La Bolsa de Tokio cayó el viernes y su principal índice tocó un mínimo en más de siete semanas, después de que los inversores optaran por la recogida de beneficios en la última jornada del año fiscal nipón.
El índice de referencia Nikkei cerró con un retroceso de 153,96 puntos, un 0,81 por ciento, y quedó en 18.909,26 enteros, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió 14,99 puntos, un 0,98 por ciento, hasta las 1.512,60 unidades.
El selectivo de referencia cayó a su nivel más bajo desde el 9 de febrero, a pesar de haber ganado más de 100 puntos en la primera parte de la jornada, debido a la recogida de beneficios ante el cierre del año fiscal nipón.
Las pérdidas se vieron, sin embargo, limitadas gracias a los últimos datos económicos de Estados Unidos, Japón y China.
El Departamento de Comercio estadounidense publicó el jueves una estimación de la evolución del PIB en 2016 dos décimas por encima de la previsión anterior, la producción industrial de Japón aumentó un 2 por ciento intermensual en febrero y la actividad industrial china subió en marzo al mayor nivel en casi cinco años.
Los principales exportadores nipones sufrieron durante la jornada debido a una nueva caída del dólar frente al yen.
Fujitsu se dejó un 2,2 por ciento, mientras que Fuji Heavy Industries bajó un 1,4 por ciento.
Por su parte, los títulos del gigante Toshiba Corporation se apreciaron un 5,8 por ciento tras la subida del 4,01 por ciento de la víspera, cuando los accionistas de la compañía aprobaron la escisión de su rama de chips de memoria, una de sus unidades más rentables, para obtener liquidez ante sus problemas financieros.
En la primera sección, 1.677 valores retrocedieron frente a los 270 que avanzaron, mientras que 65 cerraron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,588 billones de yenes (21.671 millones de euros), frente a los 2,060 billones de yenes (17.235 millones de euros) de la víspera.
La Bolsa de Tokio cerró en negativo una semana complicada, que arrancó con un cierre por debajo de la barrera psicológica de los 19.000 puntos por primera vez en más de seis semanas el lunes, causada por la fortaleza del yen.
Aunque la moneda local se debilitó el martes, impulsando las compras en Tokio y propiciando un cierre en positivo, la plaza nipona cosechó pérdidas el resto de la semana tras la decisión de los inversores de fijar sus ganancias de cara al cierre del año fiscal japonés. (EFE)
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