Gobierno japonés cree que organismo de la ONU es usado con fines políticos
El Gobierno nipón anunció que pedirá a la Unesco una revisión de su Registro Memoria del Mundo, tras la polémica inclusión en este listado de los documentos presentados por China sobre la matanza de Nankín, cometida por tropas niponas entre 1937 y 1938.
«Pediremos con firmeza que el sistema de registro de documentos sea mejorado», dijo en rueda de prensa el ministro portavoz nipón, Yoshihide Suga, al referirse al reconocimiento de la Unesco de los documentos enviados por Pekín, que ha despertado gran irritación en Tokio.
Japón cree que el funcionamiento de la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) debería ser revisado «para evitar su uso con fines políticos» y para «garantizar la justicia y la transparencia», y presentará esta petición en la conferencia general que el organismo celebrará el 3 de noviembre en París, añadió Suga.
Tras conocer la decisión de la Unesco el pasado sábado, el Ejecutivo nipón transmitió a China su queja formal a través de su Embajada en el país vecino, y posteriormente amenazó con dejar de financiar a la Unesco por reconocer los documentos sobre Nankín.
Japón fue en 2014 el segundo país que más fondos aportó al organismo de la ONU, con 3.720 millones de yenes (27 millones de euros/31 millones de dólares), según datos del Ministerio nipón de Asuntos Exteriores.
Los polémicos documentos incluyen actas del Tribunal Penal Militar Internacional para el Lejano Oriente, que condenó a varios altos cargos nipones por crímenes de guerra, así como fotos de la matanza supuestamente tomadas por el Ejército Imperial nipón y vídeos filmados por un misionero estadounidense, entre otros.
La matanza de Nankín (este de China) es considerada uno de los capítulos más sangrientos de la invasión nipona, y ella murieron 300.000 personas y se violaron a 20.000 mujeres y niñas, según cifras chinas. (EFE)