Su partido pierde los tres escaños que tenía
El Partido Liberal Demócrata (PLD), del primer ministro nipón, Shinzo Abe, recibió en las elecciones generales un sonado castigo en la prefectura japonesa de Okinawa (sur), donde perdió toda su representación tras la polémica sobre una nueva base militar de EE.UU.
El PLD, a pesar de su contundente victoria a nivel nacional, perdió los tres escaños con los que contaba en los cuatro distritos de la prefectura de Okinawa, que alberga a más de la mitad de los cerca de 48.000 efectivos militares que EE.UU. mantiene en Japón.
El resultado se interpreta como una respuesta a la oposición de los habitantes de este archipiélago (en donde el 20 % del suelo de la isla principal es terreno militar estadounidense), a la reubicación de una base militar pactada entre el Gobierno de Tokio y Washington.
El polémico proyecto consiste en trasladar la base aérea de Futenma, que se encuentra ubicada en un núcleo urbano, hasta un paraje mucho más recóndito al norte de la isla.
Tokio ha defendido este plan de recolocación alegando que es la «única solución viable» para, manteniendo la presencia estadounidense en el territorio, hacer frente a los peligros que supone que la actual base de Futenma se encuentre en una zona urbana altamente poblada.
El primer ministro lamentó los resultados de su partido en la región, y afirmó que «seguirán promoviendo el traslado de la base y explicando al pueblo» este proyecto, según dijo en declaraciones a la NHK.
«No podemos hacerlo todo desde el lado de Japón, ya que también hay una contraparte», dijo Abe en alusión a EE.UU.
La base de 480 hectáreas se sitúa en el mismo centro urbano de la localidad de Ginowan (94.000 habitantes), completamente rodeada de viviendas y edificios públicos, lo que durante años ha generado protestas de sus ciudadanos por el ruido y por la posibilidad de que se produzcan accidentes.
La mayoría de la población local reclama que la base salga del territorio de Okinawa y que se reduzca la presencia militar estadounidense en el archipiélago.
El pasado noviembre, Takeshi Onaga, un político conservador que se opone frontalmente al proyecto, ganó de manera arrolladora las elecciones a gobernador de la prefectura de Okinawa.
El candidato, de 64 años y exalcalde de Naha, la capital de la región, se impuso claramente al hasta ahora gobernador Hirokazu Nakaima, que ostentó el cargo durante dos mandatos desde 2006 y que contaba con el apoyo del PLD. (EFE)