Además, su supervisor lo golpeaba e insultaba
En noviembre de 2010, un hombre de 24 años que dirigía un restaurante se suicidó, agobiado por el exceso de trabajo y el maltrato físico y verbal que sufría por parte de un supervisor.
Cuatro años después, el Tribunal de Distrito de Tokio dispuso que la cadena de restaurantes para la que el hombre trabajaba, el presidente de la compañía y el supervisor les paguen a los padres de la víctima una indemnización por daños ascendente a 57,9 millones de yenes (509.000 dólares), informó la agencia Kyodo.
El hombre, que ingresó al restaurante en 2007, trabajó un promedio de 190 horas extra mensuales en los siete meses anteriores a su suicidio.
El presidente del tribunal, Akira Yamada, resaltó que el suicida apenas tenía un día de descanso cada varios meses, y que el trastorno mental que lo empujó a la muerte fue causado por la carga psicológica que lo oprimía por el exceso de trabajo y el acoso laboral.
Los padres del suicida habían exigido una compensación de 73 millones de yenes (643.000 dólares).
En 2012, las autoridades laborales locales reconocieron el suicidio como muerte relacionada con el trabajo. (International Press)