Tras una ola de divorcios en Japón que en 2002 llegó a su pico con 290.000 casos y que ahora se encuentra en caída, 235.000 divorcios en 2012, las mujeres maduras entre 40 y 50 años han comenzado a revisar su vida amorosa y a intentar reconstruirla. Al mismo tiempo, las que no se casaron están dando pasos importantes para convertir su madurez en nueva primavera.
Cuando una japonesa, en la franja de los 40 años, confesó en un boletín de la página web del diario «Yomiuri», el dolor que había sentido al romper con su pareja tras ocho años de relación, inmediatamente varias mujeres de la misma generación compartieron sus experiencias de amor y desengaño para animarla.
Todas coincidieron en que al encontrarse sola a esa edad, se sintieron desesperadas pensando que ya no habría una oportunidad para conseguir una pareja.
Si fueran unas veinteañeras, no tendrían que esperar mucho tiempo para que otro pretendiente apareciera, pero conforme una se acerca a los 40 va perdiendo el dinamismo en la búsqueda de nueva pareja y comienza a reinar el conformismo porque se asume que “nadie se fijará en una mujer de esta edad”.
HAY MILLONES DE SOLTEROS
En el Japón de hoy, el número de solteros asciende a 30 millones de personas, entre los cuales más de cinco millones de personas solteras o divorciadas se encuentran entre los 40 y 60 años de edad.
Esto significa que cinco millones de personas están disponibles para iniciar una relación amorosa.
De hecho, hay mujeres que sí gozan de las relaciones amorosas sin problemas por su edad. La japonesa Yukie, una oficinista de 45 años es una de ellas.
Ahora está saliendo con un hombre de su misma edad a quien conoció a través de unos amigos. Él la invitó a una cita a la tercera vez que se encontró con ella en una reunión. “En realidad, no lo conocía bien aún en esa época, por eso mismo fue que le dije que quería conocerlo más. Quizás eso funcionó”, dijo Yukie.
A esta japonesa nunca le faltaron novios en los últimos cuatro años y medio, pero fue porque es muy hábil para comunicar sus sentimientos, aunque no siempre fue así. Cuando tenía treinta y pocos años no se sentía segura para conversar con los hombres. El cambio se produjo al cruzar la línea de los 40.
RELAJADA Y TRANQUILA
“En los 30 yo tenía un fuerte deseo de casarme, pero ingresando a la franja de los 40 me sentí más relajada. Es cierto que a esta altura hay amigas que están casadas y viven felices, pero por otra parte también tengo amigas que quedaron nuevamente solteras tras un doloroso divorcio”, dijo.
Ahora le va tan bien que suele ser alabada por los hombres porque “sabe preocuparse por los otros”.
Al acumular años, la mujer debe de haber sumado experiencias, inclusive el dolor de un desengaño amoroso, que la hacen aún más generosa con los otros. “A estas mujeres maduras se les nota su preocupación por los otros en su lenguaje, expresión y porte, dando una sensación de paz”, analizó Takashi Kimura, consultor en las relaciones amorosas que ha atendido a más de 1.300 parejas de todas las edades.
Estas mujeres pueden transmitir de una forma natural su sentimiento de “quiero conocerte más”, porque ellas ya están libres de la presión y de la táctica, frecuentes en las mujeres jóvenes que buscan a una pareja, según el experto japonés.
Por su parte, los hombres en sus 40 y 50 años están pensando: “las mujeres veinteañeras no se fijan en mí. Las mujeres en sus 30 aún tienen un ideal fijo y además son muy exigentes sobre el matrimonio y la maternidad. Entonces, me iría mejor alguien de la misma generación”.
Quien responde a este deseo son las mujeres maduras como Yukie que brindan paz al hombre.
“Hay que pensar que en 40 años de vida uno ha venido acumulando experiencias, técnicas en relaciones interpersonales así como la sensualidad de una mujer madura”, concluyó Kimura. (ipcdigital)
Lo mejor de la mujer madura de 40 a 50
1. Brinda una sensación de paz
2. Su lenguaje y porte son maduros
3. Sabe comportarse con prudencia en cualquier situación
4. Es independiente mental y económicamente
5. Es comprensiva y generosa con el dolor de los otros
La mujer que los japoneses rehuyen
1. La mujer que depende del hombre tanto mental como económicamente
2. La que se comporta sin prudencia y que ama de una manera descontrolada
3. La que se deja llevar por las emociones del momento
4. Aquella que tiene una relación amorosa con más de un hombre a la vez
5. La mujer que presiona para casarse calculando el tiempo que le queda para poder concebir un hijo