Divertido video en YouTube muestra su apego a él
Sakura es un pingüino hembra africano de 10 años. Vive en un santuario de aves en la prefectura de Shimane y ha elegido como destinatario de sus afanes amorosos a Takeshi Notsu, un hombre de 40 años que trabaja en el parque.
En diciembre del año pasado, uno de los empleados del santuario se percató de que Sakura seguía a todas partes a Notsu. Adonde iba él, iba Sakura. Y si tenía que correr para no perderlo de vista, lo hacía.
Hay un video en YouTube, que se acerca al millón de visitas, en el que se aprecia cómo el pingüino se le pega a Notsu como si fuera su sombra.
Sin embargo, no todo es tierno en esta singular historia, según Asahi Shimbun. Sakura es celosa. Si ve a Notsu ocupándose de otros animales le picotea los pies. Y no admite rivalidad ni entre los de su especie, tanto así que tratan de mantenerla apartada de otros pingüinos hembras para que no se pelee con ellos. (ipcdigital)
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