Presidente de nueva institución es cuestionado por haber contribuido al crecimiento de la energía nuclear
Un nuevo organismo independiente supervisa desde el miércoles la seguridad de los reactores nucleares en Japón, tras el debate abierto por el desastre del año pasado en la planta atómica de Fukushima Daiichi.
La nueva Autoridad de Regulación Nuclear está encabezada por el experto en radiactividad Shunichi Tanaka, informó la agencia Kyodo.
Tanaka tendrá un papel clave a la hora de asegurar el cumplimiento de las normas de seguridad aprobadas por el Gobierno este último año.
Entre ellas se encuentra la de limitar a 40 años la vida útil de los reactores nucleares, que anteriormente no tenían un límite temporal para su actividad operativa, y la de aplicar los últimos hallazgos científicos a las instalaciones existentes.
Esta autoridad también tendrá entre sus competencias la formulación de criterios para reactivar reactores, la inmensa mayoría de los cuales permanecen detenidos en Japón ante la creciente preocupación pública por su seguridad tras el accidente en Fukushima.
En la actualidad, Japón sólo tiene dos de sus más de cincuenta reactores atómicos comerciales activos.
Sin embargo, el organismo ya ha despertado el recelo de algunos políticos y grupos civiles, que han cuestionado la neutralidad de Tanaka como presidente, dado que ocupó cargos que contribuyeron al crecimiento de la industria nuclear en Japón antes de Fukushima.
Los otros cuatro altos cargos del nuevo cuerpo son Kenzo Oshima, ex embajador ante la ONU de Japón, Kunihiko Shimazaki, del Comité de Coordinación para la Predicción de Terremotos, Kayoko Nakamura, de la Asociación Japonesa de Radioisótopos y Toyoshi Fuketa, de la Agencia de Energía Atómica de Japón.
La administración del organismo contará con unos 350 funcionarios de la Agencia para la Seguridad Nuclear e Industrial (NISA), a la que sustituye desde ayer esta institución.
Dado que NISA fue duramente criticada tras el accidente de Fukushima por depender del Ministerio de Industria, que tradicionalmente promovió el uso de la energía nuclear, el Gobierno ha creado este nuevo organismo con un perfil más independiente y unos estatutos similares al de la comisión antimonopolio del país.
La nueva autoridad también deberá rectificar y establecer los roles de las organizaciones estatales involucradas en materia de seguridad nuclear, cuyos límites para garantizar la seguridad ciudadana resultaron borrosos durante la crisis en Fukushima. (EFE)