Una niña japonesa le pregunta al Papa por el dolor causado por la catástrofe
El Papa Benedicto XVI aprovechó el viernes santo para aparecer en la televisión italiana y responder siete preguntas de todo el mundo.
Una de las preguntas llegó de Japón, lanzada por una niña de siete años que quiso saber por qué los niños tienen que sufrir tanto, en alusión al terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo.
El Sumo Pontífice le dijo que no tiene una respuesta y que Jesús sufrió tanto como los niños japoneses.
La niña preguntó:
“Me llamo Elena, soy japonesa y tengo siete años. Tengo mucho miedo porque la casa en la que me sentía segura ha temblado muchísimo, y porque muchos niños de mi edad han muerto. No puedo ir a jugar al parque. Quiero preguntarle: ¿Por qué tengo que pasar tanto miedo? ¿Por qué los niños tienen que sufrir tanta tristeza? Le pido al Papa, que habla con Dios, que me lo explique”.
El Papa respondió:
“Querida Elena, te saludo con todo el corazón. También yo me pregunto: ¿Por qué es así? ¿Por qué ustedes tienen que sufrir tanto mientras otros viven cómodamente? Y no tenemos respuesta, pero sabemos que Jesús ha sufrido como ustedes, inocentes, que Dios verdadero se muestra en Jesús, está a su lado. Esto me parece muy importante, a pesar de que no tenemos respuestas, si la tristeza sigue: Dios está a su lado y tienen que estar seguros de que esto los ayudará. Y un día podremos comprender por qué ha sucedido esto”.
Luego agregó: “En este momento me parece importante que sepan que ‘Dios me ama’, aunque parezca que no me conoce. No, me ama, está a mi lado, y tienen que estar seguros de que en el mundo, en el universo, hay tantas personas que están a su lado, que piensan en ustedes, que hacen todo lo que pueden por ustedes, para ayudarlos. Y ser conscientes de que, un día, yo comprenderé que este sufrimiento no era una cosa vacía, no era inútil, sino que detrás del sufrimiento hay un proyecto bueno, un proyecto de amor. No es una casualidad. Siéntete segura, estamos a tu lado, al lado de todos los niños japoneses que sufren, queremos ayudarlos con la oración, con nuestros actos y deben estar seguros de que Dios los ayuda. Y de este modo rezamos juntos para que la luz llegue a ustedes cuanto antes”.
Be the first to comment