Anciano de más de 80 años dice que por su edad da lo mismo dónde esté
Pese a la crisis nuclear, varias personas que residen en el área de evacuación de 20 kilómetros alrededor de la central de Fukushima se niegan a abandonar sus casas.
Un anciano que supera los 80 años y cuyo único medio de contacto con el mundo exterior es un teléfono celular le dijo a Mainichi que su avanzada edad es un impedimento para dejar su hogar, situado a 18 kilómetros de la malograda planta nuclear.
El hombre vive solo desde que enviudó hace 15 años.
«Quiero quedarme aquí. No es fácil irse. Mi avanzada edad es la principal razón», afirmó. Sus amigos y otras personas le llevan comida.
La hija del anciano fue evacuada de su casa con su familia y le ha pedido a su padre que se una a ellos, pero él se niega.
Cuando discutieron sobre los efectos perniciosos de la radiación, su padre replicó: «Tengo más de 80 años, no hace diferencia dónde esté».
La mujer fue a ver a su padre el 26 de marzo. Lo encontró en la sala de su casa. «Ah, eres tú», le dijo como de costumbre. No tenía agua y el sitio era un caos.
La policía también lo visitó para convencerlo de dejar su casa, pero fue en vano.
El anciano es diabético y padecería de un caso leve de demencia. Su hija está preocupada de que él no entienda la gravedad de la situación.
«Si su salud empeora repentinamente, yo no voy a poder ir de inmediato a ayudarle,» dijo, y agregó que tratará nuevamente de convencer a su padre de que abandone su casa.
El 1 de abril, el Ministerio de Defensa reveló que 29 personas que viven en un radio de 20 kilómetros alrededor de la planta nuclear se encontraban en sus casas. Mientras tanto, el gobierno de la ciudad de Minami-Soma dijo que 59 personas que residen dentro del área de evacuación aún estaban en sus hogares el 7 de abril.
«La vida en los refugios es difícil» y «Tengo mascotas que cuidar» son algunas de las razones citadas por las 59 personas para justificar su negativa a dejar sus casas.
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