La compañía Nintendo anunció hoy la suspensión temporal de sus anuncios publicitarios en la cadena Fuji TV. Esta decisión se suma a otras más de 50 empresas, como Toyota, Kao y Suntory Holdings, que han retirado sus anuncios tras la controversia que involucra al talento televisivo Masahiro Nakai por abuso sexual y la supuesta implicación de un empleado de Fuji TV en el escándalo.
Nintendo ha sustituido sus anuncios en Fuji TV por espacios de publicidad pública proporcionados por la organización sin fines de lucro AC Japan. Según representantes de la empresa, la decisión responde a las dudas generadas por el manejo del caso por parte de la televisora.
En una conferencia de prensa celebrada el 17 de enero, Koichi Minato, presidente de Fuji TV, reconoció que la cadena estaba al tanto de la situación desde junio de 2023 y que se investigará a fondo mediante un comité externo de abogados. Sin embargo, la independencia y objetividad del comité han sido cuestionadas.
REACCIONES EMPRESARIALES
Otras empresas como Asahi Group Holdings y Aeon también han detenido sus campañas en Fuji TV. Aeon declaró que considerará la reanudación de los anuncios cuando se aclaren los hechos y se implemente un plan claro de mejora en la cadena.
Esta ola de suspensiones afecta directamente los ingresos publicitarios de Fuji TV, que en el período de abril a septiembre de 2024 obtuvo 36.800 millones de yenes (unos 236 millones de dólares) en anuncios de programas regulares y 34.300 millones de yenes en anuncios únicos. Analistas prevén que esta crisis podría derivar en una reducción significativa de ingresos publicitarios, especialmente para los programas especiales programados para marzo y la temporada de primavera.
El escándalo también ha generado fluctuaciones en la bolsa. Las acciones de Fuji Media Holdings cerraron ayer, 20 de enero, con un alza del 6 %, impulsadas por la recompra tras la caída inicial causada por la controversia. A pesar de esto, los analistas advierten que las incertidumbres a largo plazo podrían afectar la confianza de los inversores.
EL FUTURO DE FUJI TV
Mientras tanto, Fuji TV enfrenta presión pública y empresarial para abordar el caso con mayor transparencia. Minato afirmó que se investigarán posibles incidentes similares ocurridos en el pasado, aunque reiteró su confianza en que estos no existieron.
El escándalo, que ha expuesto fallos en la gestión interna de la televisora, también podría reconfigurar las relaciones entre las grandes marcas y los medios de comunicación en Japón, donde la imagen corporativa juega un papel fundamental en las decisiones publicitarias. (RI/AG/IP/)
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