El gobierno de la prefectura de Shizuoka ha dado un importante paso adelante al conceder permiso a la Central Japan Railway Co. para realizar un estudio geológico que prepara el terreno para la construcción de una nueva línea de tren de levitación magnética (maglev) entre Tokio y Nagoya. Este avance marca un cambio crucial en la política de la prefectura, que hasta ahora había sido un obstáculo para el proyecto debido a la oposición del exgobernador Heita Kawakatsu, quien renunció abruptamente en mayo.
La aprobación escrita se produjo después de que el gobierno local de Shizuoka recibiera el consentimiento de los municipios a lo largo del río Oi, quienes habían expresado inicialmente su preocupación por la posible reducción del flujo de agua debido a las obras. La perforación del túnel es una etapa crítica en la construcción del Chuo Shinkansen, una línea diseñada para ser la primera del mundo en utilizar tecnología maglev comercial, alcanzando velocidades de hasta 500 kilómetros por hora.
El gobernador actual de Shizuoka, Yasutomo Suzuki, expresó su satisfacción tras la aprobación: «El estudio es necesario para continuar con la construcción. Me alegra que podamos avanzar con la perforación», dijo en una rueda de prensa. Este cambio de rumbo en la administración local abre una ventana de oportunidad para que la obra se reanude tras años de enfrentamientos y retrasos.
PREOCUPACIÓN POR EL RÍO OI
El estudio geológico autorizado será clave para evaluar las condiciones del terreno y los niveles de agua subterránea a lo largo de una sección de aproximadamente 300 metros en la frontera entre Shizuoka y Yamanashi. Esta evaluación es crucial para la perforación del túnel, cuyo proceso podría afectar al flujo del río Oi, una fuente de preocupación para las autoridades locales desde el inicio del proyecto.
El momento del estudio ha sido cuidadosamente planificado. Se llevará a cabo hasta noviembre de 2025, coincidiendo con el cierre temporal de una presa situada aguas arriba del río Oi para tareas de mantenimiento, lo que aumentará temporalmente el flujo de agua y reducirá el riesgo de impacto ambiental negativo. Los gobiernos locales han dado su visto bueno bajo la condición de que cualquier incidente se informe de inmediato y que, en caso de que el estudio se extienda más allá del plazo previsto, JR Central reafirme la aprobación con las autoridades.
Por su parte, JR Central ha emitido un comunicado en el que asegura que «llevará a cabo el trabajo gestionando adecuadamente los riesgos». La compañía ferroviaria, responsable del proyecto del maglev, ha insistido en su compromiso de minimizar los impactos ambientales mientras continúa con una obra que ha sido largamente esperada.
FUTUROS PLANES DEL CHUO SHINKANSEN
Originalmente, el primer tramo de la línea de alta velocidad entre Tokio y Nagoya estaba previsto para abrir en 2027. Sin embargo, la oposición prolongada del exgobernador Kawakatsu y los consiguientes retrasos llevaron a JR Central a anunciar en marzo que no podría cumplir con ese plazo, y que la inauguración podría aplazarse hasta 2034 o incluso más tarde. La línea también se extenderá eventualmente hasta Osaka, ofreciendo un nuevo estándar en transporte ferroviario de alta velocidad con los trenes maglev.
El acuerdo alcanzado en junio con las prefecturas de Shizuoka y Yamanashi para realizar el estudio geológico es un avance significativo. A pesar de los desafíos, este proyecto promete revolucionar el transporte en Japón y consolidar aún más su liderazgo en tecnología ferroviaria de vanguardia. (RI/AG/IP/)
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