Filipinas está dispuesta a deportar a Yuki Watanabe, alias Luffy, el hombre sindicado como el cerebro de una serie de robos en Japón desde el año pasado, informó Kyodo.
Sin embargo, antes Filipinas deberá resolver un caso local.
Japón y Filipinas no tienen un tratado de extradición.
Una vez resuelto el caso en Filipinas, las autoridades de ese país podrán deportarlo a Japón.
Watanabe ha sido acusado de actuar de manera violenta contra mujeres y niños.
Es posible, sin embargo, que el caso sea inventado para evitar la deportación.
Kyodo entrevistó a un reportero de Corea del Sur que una vez estuvo detenido en el mismo centro de inmigración en Manila donde está Watanabe.
El surcoreano reveló que es frecuente que extranjeros detenidos en el centro que enfrentan acusaciones en sus países de origen paguen a filipinos para que inventen cargos en su contra y así prolongar su detención.
Una transacción de este tipo se puede arreglar por alrededor de 812 dólares.
Los detenidos pueden alargar los procesos alegando mala salud.
El surcoreano contó que un extranjero logró estar casi diez años detenido en Manila, evitando la deportación, a través de estas artimañas.
El reportero dijo que un allegado que actualmente está en el centro de inmigración en Manila le contó que Watanabe ocupa una “sala VIP”, donde los gastos de aire acondicionado al mes ascienden al equivalente a 100 mil yenes (770 dólares).
El surcoreano declaró que mientras estuvo en el centro pudo usar un teléfono móvil.
El secretario de Justicia de Filipinas, Jesus Crispin Remulla, dijo que el gobierno está investigando si los cargos contra Watanabe fueron inventados.
La policía de Japón tiene registrados al menos 20 casos de robo en 14 prefecturas desde el año pasado, y ha arrestado a más de 30 personas por su relación con ellos. (International Press)
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