Dos reos que se encontraban en el corredor de la muerte fueron ejecutados esta mañana, informó NHK.
Se trata de dos exmafiosos, Keizo Okamoto de 60 años y Hiroya Suemori de 67 años quienes en 1985 mataron a dos ejecutivos de una empresa en Osaka tras robarles 100 millones de yenes.
Okamoto y Suemori enterraron los cuerpos de sus víctimas bajo concreto. Fueron condenados a muerte en 2004.
El número de ejecuciones en Japón en 2018 se elevó a 15.
Desde que el primer ministro, Shinzo Abe, asumió el poder en diciembre de 2012, ha habido 36 ejecuciones.
Japón ha sido criticado a nivel internacional por aplicar la pena de muerte.
En el frente interno, la Federación de Asociaciones de Abogados de Japón ha pedido que la pena capital se suprima en 2020 y que sea reemplazada por la cadena perpetua.
Además, este mes se formó un grupo multipartidario de más de 50 legisladores para discutir el futuro de la pena de muerte en Japón. (International Press)
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