Una serie de empresas japonesas está trasladando su producción de China a Japón u otro países para minimizar el impacto de la escalada de la guerra comercial entre EEUU y China, revela Asahi Shimbun.
El gigante químico Asahi Kasei ha suspendido su producción de resina en China. La compañía japonesa está reforzando la producción en Japón de resina para piezas de automóviles para el mercado estadounidense.
En agosto, Mitsubishi Electric comenzó a transferir la fabricación de máquinas de rayos láser con destino a Estados Unidos a su planta de Nagoya después de que las máquinas construidas en China están sujetas a aranceles.
Mientras tanto, Komatsu está mudando la producción de piezas de pala hidráulica a Japón y Estados Unidos. La empresa sufriría una pérdida anual de 4 mil millones de yenes (35 millones de dólares) debido a los altos aranceles si continúa produciendo en China.
Un alto directivo de Hitachi Construction Machinery, que registró ventas récord entre abril y junio gracias en parte a sus fuertes exportaciones de palas hidráulicas a Asia y América del Norte, declaró a Asahi que están observando “con nerviosismo las repercusiones (de la guerra comercial) en el mercado global».
Las preocupaciones no han hecho más que agravarse después de que Estados Unidos anunció la aplicación de aranceles a productos chinos por alrededor de 200 mil millones de dólares. En represalia, China dijo que impondría aranceles a productos estadounidenses por 60 mil millones de dólares.
Los consumidores japoneses sentirán el impacto de la guerra comercial en un futuro cercano, advirtió Kuniharu Nakamura, presidente del Consejo de Comercio Exterior de Japón y presidente de Sumitomo.
Japón también podría verse envuelto en un conflicto comercial con Estados Unidos, advierte Asahi.
Se espera que a finales de mes ambos países mantengan conversaciones «libres, justas y recíprocas» sobre asuntos comerciales. El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, tiene previsto reunirse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Funcionarios del gobierno japonés admitieron que no tienen la menor idea de cómo se desarrollarán las conversaciones con la administración Trump debido a que han tenido pocas negociaciones previas. (International Press)
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