Quiso la fortuna ponerse del lado de una mujer de 74 años que se salvó de perder tres millones de yenes (27.400 dólares) el pasado 8 de agosto.
Su salvador fue un policía de Tokio que justo había acabado su servicio en una estación policial y estaba yendo a su casa. Mientras se dirigía a ella, vio en un parque algo que le pareció sospechoso: una anciana entregándole una bolsa de papel a un joven.
El policía llamó al tipo. Este, pillado, huyó del lugar, pero el policía lo siguió y logró atraparlo.
El joven, identificado como Naoto Ogame, admitió haber recibido la bolsa con los tres millones de yenes, pero negó su participación en una estafa, según Tokyo Reporter.
¿Por qué fue la mujer al parque con tres millones de yenes? Porque había recibido la llamada telefónica de un hombre que se hizo pasar por su hijo para pedirle dinero para compensar una “inversión fallida”. (International Press)
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