Emperatriz de Japón cumple 82 años
Con motivo de la celebración hoy de su 82 aniversario, la emperatriz japonesa Michiko afirmó que sintió «asombro y respeto» cuando su marido, el emperador Akihito, expresó el pasado agosto su intención de abdicar.
Michiko hizo un repaso de los eventos más importantes acaecidos a lo largo de este año, en un comunicado emitido por la Agencia de la Casa Imperial de noticias con motivo de su cumpleaños.
La emperatriz afirmó que siguió con «asombro y respeto» el mensaje leído por el emperador y televisado el pasado 8 de agosto, en el que éste expresó su deseo de abdicar en los próximos años debido a su avanzada edad (82 años) y a su delicada salud.
El discurso del emperador «refleja su pensamiento» y fue redactado tras consultar la decisión «ampliamente» con su hijo mayor y príncipe heredero, Naruhito, y con su hijo menor, el príncipe Akishino, según dijo la emperatriz.
Michiko añadió que sintió «una gran sorpresa» y «pena momentánea» al leer los titulares sobre la futura renuncia al cargo de Akihito, que aparecían en portada de los principales periódicos del país al día siguiente.
Desde el mensaje televisado del emperador, el Gobierno ha comenzado a trabajar en una legislación especial para permitir que Akihito abandone el trono antes de que muera, un supuesto que no contempla actualmente la Constitución japonesa.
El Ejecutivo espera que, una vez superados los trámites parlamentarios, la abdicación se produzca en 2018, año cuya idoneidad habría sugerido el propio jefe de Estado a funcionarios de la Agencia de la Casa Imperial, según publicaron los medios nipones.
En su comunicado de hoy, la emperatriz también se refirió a los fuertes terremotos que sacudieron el sudoeste de Japón en abril y trasladó su apoyo a los damnificados, y destacó la necesidad de que la población nipona se prepare ante la posibilidad de que se produzcan más desastres naturales. (EFE)
Deberían no sólo aprobar una reforma constitucional que permita al emperador abdicar sino también una que permita consultar al pueblo sobre la continuidad de la monarquía y la validez de la constitución actual que fue redactada por la secretaria de Macarthur e impuesta al pueblo japonés de manera irrita.