La mujer, en minifalda, actuaba como “anzuelo” para atraer a pervertidos
En Japón son moneda corriente las noticias que dan cuenta del arresto de hombres sorprendidos por tomar fotos debajo de la falda de una mujer.
Una pareja de esposos decidió sacar provecho de esta obscena práctica. ¿Cómo? A través del chantaje.
La mujer, Fubuki Sakimura, era el “anzuelo” para atraer a los pervertidos. La chica de 21 años utilizaba minifaldas y buscaba llamar la atención en sitios públicos, informó Asahi Shimbun.
Así ocurrió con un hombre de 29 años en una tienda de aparatos electrónicos en Osaka, donde Fubuki se inclinó deliberadamente para atraer al sujeto que le tomó una foto debajo de la falda.
Ichiko Sakimura (31), el esposo de Fubuki, le exigió 10.000 yenes (93 dólares) al sorprendido hombre para no delatarlo. No satisfecho con la suma, más adelante le pidió 490.000 yenes (4.500 dólares).
Lo que los Sakimura no imaginaron es que el tipo los denunciaría ante la policía.
Sakimura reveló que desde septiembre del año pasado han chantajeado a cerca de 20 hombres que tomaron fotos obscenas de su esposa. El modus operandi era sencillo y similar al descrito arriba: la mujer, siempre con minifalda, se inclinaba en tiendas y otros lugares concurridos para atraer ojos masculinos.
Los esposos idearon su método de extorsión luego de sorprender a un hombre tomándole una foto debajo de la falda a Fubuki.
Sakimura estaba confiado en que nadie que incurra en este tipo de prácticas obscenas los reportaría ante la policía.
A juicio de la policía, el hombre que los denunció no cometió ningún delito porque fue inducido a tomar la foto. (ipcdigital)