
La policía de Osaka arrestó a un joven de 21 años, de nacionalidad japonesa, por el presunto asesinato de su madre, una ciudadana rusa de 50 años, ocurrido en junio en un departamento del distrito de Naniwa. El sospechoso, identificado como Kaneki Ito, habría golpeado a su madre en repetidas ocasiones, estrangulado y fracturado su cuello para robarle 15.000 yenes en efectivo.
El hallazgo del cuerpo de la víctima, Elena Ito, se produjo el 27 de junio por la noche, luego de que su esposo —quien vivía separado— se preocupara por la falta de contacto durante varios días y acudiera al departamento. La mujer fue encontrada sin vida, acostada boca arriba en la cama y con rastros de sangre en el rostro.
Una autopsia determinó que la causa oficial de muerte fue un golpe de calor, ocurrido alrededor de la mañana del 26 de junio. Sin embargo, el cuerpo presentaba múltiples golpes en el rostro y hematomas defensivos en la mano derecha. La policía concluye que la víctima fue atacada y, en ese estado de vulnerabilidad, falleció por las condiciones de calor extremo.
Las investigaciones indican que el hijo habría ingresado al departamento de su madre desde la terraza de un edificio contiguo. Cámaras de seguridad lo captaron accediendo al inmueble adyacente el mismo día del crimen. El 7 de julio, fue detenido por allanamiento de morada. Durante los primeros interrogatorios, el joven declaró: “Le pegué varios golpes, le apreté el cuello por más de cinco minutos y lo fracturé”. Sin embargo, tras su arresto formal por robo con homicidio, guarda silencio ante los investigadores.
ANTECEDENTES DE VIOLENCIA
Vecinos y conocidos de Elena Itō confirmaron que el joven había protagonizado incidentes violentos en el pasado. Un amigo de la víctima relató que, tres meses antes del crimen, la mujer fue agredida por su hijo, quien además destrozó el interior de su vivienda tras ingresar por el balcón. Otra compañera de trabajo comentó que, dos semanas antes del asesinato, Elena le confesó sentir miedo y le pidió mudarse cerca para sentirse más segura. También le mostró videos donde su vivienda aparecía destrozada, en un pedido desesperado de ayuda.
Según la policía, el joven solía exigirle dinero a su madre con frecuencia. Las autoridades continúan investigando el contexto, los motivos y la cronología exacta del crimen. (RI/AG/IP/)
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