Donald Trump, reelecto presidente de Estados Unidos, ha agitado el debate sobre el Canal de Panamá al advertir que podría exigir su devolución completa si no se respetan «principios morales y legales». En una publicación en redes sociales este martes, Trump criticó los elevados peajes que las empresas estadounidenses deben pagar para transitar por la vía interoceánica, calificándolos de injustos y excesivos.
El Canal de Panamá, una arteria estratégica que conecta el océano Pacífico con el Atlántico, fue inaugurado en 1914 con apoyo estadounidense y administrado por Washington hasta 1999, cuando fue transferido completamente a Panamá. Actualmente, más del 70% de los barcos que lo cruzan tienen como destino u origen puertos de Estados Unidos, seguidos por los de China y Japón.
La publicación de Trump se produce en un contexto de creciente colaboración económica entre Panamá y China, incluyendo la gestión de algunos puertos por empresas de origen chino, algo que, según analistas, podría estar exacerbando el malestar de Trump.
Trump subrayó el papel crucial de Estados Unidos en la construcción del canal, asegurando que «nunca permitiremos que el Canal de Panamá caiga en las manos equivocadas». Asimismo, recalcó que el canal no fue concebido «para beneficiar a otros países, sino como un símbolo de cooperación entre Panamá y Estados Unidos».
Sobre los peajes del canal, Trump denunció un trato «altamente injusto» hacia las empresas y la Armada de su país, y advirtió que «los abusos económicos contra nosotros deben cesar de inmediato».
El gobierno panameño, por el momento, no ha emitido declaraciones en respuesta a estas afirmaciones, que llegan en un momento de tensas relaciones comerciales internacionales, especialmente en el ámbito de las disputas entre Estados Unidos y China por su influencia en América Latina. (RI/NI/IP/)
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