El 15 de octubre, la selección de fútbol de Japón, dirigida por Hajime Moriyasu, empató 1-1 con Australia en el estadio de Saitama durante la cuarta jornada de la fase final de clasificación asiática para el Mundial 2026. Aunque los nipones dominaron gran parte del encuentro y generaron múltiples ocasiones, el marcador no reflejó su superioridad.
El partido comenzó con Japón asumiendo el control, pero la falta de acierto de cara al gol les pasó factura. En el minuto 58, un desafortunado autogol de Shogo Taniguchi puso a Australia en ventaja, concediendo el primer tanto que los japoneses encajaban en esta fase de clasificación.
No obstante, la reacción japonesa no se hizo esperar. En el minuto 76, una internada por la banda izquierda de Keito Nakamura, seguida de un centro peligroso, provocó que la defensa australiana marcara en propia puerta, igualando el marcador 1-1. Japón intentó capitalizar el impulso, pero el partido terminó sin que pudieran sumar los tres puntos.
A pesar del empate, Australia frenó la racha de victorias consecutivas de Japón. Sin embargo, los aficionados australianos no quedaron satisfechos. En las redes sociales, expresaron su descontento con el rendimiento del equipo, comentando que «Japón fue claramente superior», mientras otros criticaron el enfoque defensivo de su selección, tachándolo de «insuficiente» y «aburrido».
En la próxima jornada, Japón visitará a Indonesia, mientras que Australia recibirá a Arabia Saudita. Ambos equipos buscarán recuperar terreno y continuar en la lucha por un puesto en el Mundial. (RI/AG/IP/)
