Un hombre de 63 años ha muerto tras quedar sepultado mientras trabajaba en unas obras de alcantarillado en la ciudad de Kakogawa, en la prefectura de Hyogo.
El fallecido, identificado como Yoshihisa Mega, empleado de una empresa en Takasago, quedó enterrado por una gran cantidad de tierra al derrumbarse una de las paredes de la zanja de 2,7 metros de profundidad en la que trabajaba. El accidente tuvo lugar ayer, jueves, a las 14.15 horas, en un cruce de la localidad de Nishikankicho.
Mega fue rescatado en estado crítico y trasladado al hospital en donde murió alrededor de las 01.00 horas del día siguiente. Las autoridades indicaron que la causa de la muerte fue asfixia, debido a la presión ejercida por la tierra que lo sepultó.
En el momento del derrumbe, otros dos operarios también se encontraban en la zanja. Uno de ellos, un joven de 21 años, fue hallado con barro cubriendo la parte superior de su cuerpo. Fue trasladado al hospital, aunque no sufrió heridas de consideración.
La policía ha abierto una investigación para determinar las causas exactas del accidente y verificar si se cumplieron las medidas de seguridad correspondientes. (International Press)