La falta de tarjetas de transporte Suica, Pasmo, entre otras, emitidas por operadores ferroviarios en Japón ha dejado a muchos turistas extranjeros en una situación complicada. Estas tarjetas, que son vitales para desplazarse por el extenso sistema ferroviario del país, prácticamente se han dejado de fabricar desde hace casi un año.
Tarjetas como Suica de East Japan Railway y Pasmo, permiten su uso en sistemas de transporte en todo Japón. Sin embargo, tanto JR East como Pasmo dejaron de emitir nuevas tarjetas en el verano de 2023 debido a la escasez global de semiconductores.
Algunos turistas ahora deben descifrar sistemas de tarifas complicados para comprar boletos de papel, lo que puede resultar un proceso largo y confuso.
Las tarjetas Suica emitidas por JR East para visitantes extranjeros se pueden usar por 28 días y solo se venden en ubicaciones limitadas, como los aeropuertos de Haneda y Narita en Tokio. Aquellos que no logran comprar una en el aeropuerto deben usar boletos de papel durante toda su estancia.
JR East ha pedido disculpas por los inconvenientes causados por la falta de tarjetas debido a la escasez de stock. Aunque la escasez de chips se atribuye a la pandemia, la oferta de semiconductores se ha estabilizado y los precios han disminuido.
La tecnología FeliCa, utilizada en las tarjetas Suica y Pasmo, es casi exclusiva de Japón y permite un paso rápido por las puertas de las estaciones de tren. Sin embargo, su producción es limitada y costosa en comparación con otras tecnologías similares en el extranjero.
Varias empresas japonesas importantes solían fabricar chips compatibles con FeliCa, pero muchas han dejado el negocio de los semiconductores a favor de un solo fabricante principal que produce estos chips en la actualidad.
Aunque otras empresas de transporte en Japón no han dejado de emitir tarjetas basadas en FeliCa, la alta demanda de nuevas tarjetas Suica y Pasmo ha hecho que las compañías prefieran esperar a que los inventarios se recuperen antes de reanudar las ventas.
Una de las razones por las que JR East y otras empresas no se apresuran a reanudar las ventas de tarjetas IC es su interés en fomentar el uso de servicios basados en teléfonos inteligentes, una alternativa que consideran más sostenible a largo plazo. (RI/NI/IP/)