Toyohiko Ogura, un hombre de 73 años residente en la ciudad de Kobe, prefectura de Hyogo, recibió su segunda dosis de la vacuna contra el COVID-19 el 9 de julio de 2021.
El hombre, que sufría las secuelas de un derrame cerebral y tenía diabetes y presión arterial alta, murió al día siguiente de insuficiencia cardíaca aguda.
Su familia presentó el lunes una demanda contra el gobierno de Japón, el municipio de Kobe y el fabricante de vacunas Pfizer, a los cuales exige una compensación total de 32 millones de yenes (206.000 dólares), informa Mainichi Shimbun.
Los demandantes sostienen que las vacunas fueron promovidas a pesar de la falta de garantías sobre su seguridad.
El difunto sufría cierto deterioro de su capacidad cognitiva para tomar decisiones y los demandados le suministraron la vacuna sin explicar adecuadamente los riesgos, infringiendo su derecho a la autodeterminación, afirman.
Tras presentar la demanda, el hermano menor de Ogura declaró a los medios: “Aparte de la vacuna, no pudo haber otra causa para la muerte de mi hermano”.
También dijo que hay muchos otros en una situación similar.
La ciudad de Kobe declinó pronunciarse sobre el tema, alegando que aún no ha recibido la demanda. (International Press)
