Más del 10 % de la población en la ciudad de Minokamo, prefectura de Gifu, es extranjera.
Es una de las proporciones más altas en Japón.
Alrededor de 18.000 pacientes ambulatorios extranjeros visitan el Centro Médico Internacional de Chubu, en Minokamo, cada año por parto o enfermedad y muchos de ellos no hablan bien japonés.
Esto hace que el personal foráneo sea indispensable, resalta Asahi Shimbun.
Uno de los trabajadores del hospital es la nikkei brasileña Leticia Yamabe Binda Kuniwaki, de 35 años, que se desempeña como auxiliar de enfermería.
La mujer, que llegó a Japón cuando tenía 9 años, fue contratada en octubre de 2023 y se convirtió en empleada regular en abril de 2024 tras un periodo de prueba.
“Me gusta ayudar a la gente, así que estoy feliz de poder trabajar aquí”, dice la brasileña, para quien su nuevo trabajo es un avance en su vida.
“Pensé que la única opción para los brasileños era un trabajo en una fábrica. Nunca pensé que podría trabajar en un hospital”, declara a Asahi la mujer que está casada y tiene dos hijas.
Personas como Leticia son fundamentales no solo para atender a pacientes extranjeros. También contribuyen a mitigar la escasez de auxiliares de enfermería en la ciudad.
Yukiyo Horita, que dirige la división de enfermería en el hospital, destaca que los nuevos empleados extranjeros, como Leticia, tienen hijos que asisten a escuelas locales o están bien establecidos en la ciudad.
Horita espera que ellos echen raíces en la institución médica y capaciten a la próxima generación de trabajadores.
21 extranjeros de cinco países trabajan actualmente en el hospital.
Gracias a ellos, los pacientes extranjeros que no pueden comunicarse con los médicos japoneses -o tienen problemas para hacerlo- se sienten más tranquilos.
Uno de esos puentes es Ako Yamada, una intérprete médico oriunda de China.
Yamada decidió hacerse intérprete médico después de ver a muchos extranjeros que no podían explicar bien sus síntomas o no comprendían el tipo de tratamiento que estaban recibiendo.
No se trata solo de actuar como enlace con respecto al idioma, subraya ella, sino también de “cultura médica”.
El Centro Médico Internacional de Chubu es la única institución médica de Gifu que posee el certificado sobre atención a pacientes internacionales otorgado por la Fundación de Educación Médica de Japón y que lo distingue como un modelo a seguir por sus pares.
Los filipinos y brasileños representan el 80 % de los residentes extranjeros en Minokamo. (International Press)