Una caja de cartón con varios artículos en su interior, entre ellos un mouse de computadora, fue el anzuelo que un hombre de 29 años dejó en la puerta de su apartamento en la ciudad de Owariasahi, prefectura de Aichi.
El ladrón cayó. Resultó ser una mujer desempleada de 49 años llamada Mami Kondo, revela Japan Today.
Lo que Kondo no sabía era que el hombre había adherido un rastreador GPS a la caja.
Tras el robo, llamó a la policía, que gracias al dispositivo localizó a Kondo.
El hombre decidió colocar el GPS debido a que en el pasado le han robado paquetes en la puerta de su casa.
La policía está investigando si Kondo está detrás del hurto de varios paquetes de delivery en las puertas de casas en la ciudad desde el otoño pasado. (International Press)
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