Una noche de la semana pasada, Mikihiro Okiyama, un hombre de 28 años, fue a un bar de anfitrionas en Tokio. Entre comida, bebidas y otros cargos, su cuenta ascendió a 122.800 yenes (813 dólares).
Como no tenía dinero consigo, fue a una tienda cercana con el gerente del bar para sacar plata de un cajero automático.
Sin embargo, Okiyama no tenía saldo suficiente y de pronto pateó al gerente en la cara por la espalda (tal como muestra la imagen) y huyó, según ANN News.
Era alrededor de las 12:30 a.m. del 15 de marzo.
La policía de Tokio anunció esta semana el arresto de Okiyama, residente en la prefectura de Saitama, empleado de un restaurante y, además, luchador de un deporte de combate, informa Mainichi Shimbun.
Detenido por robo, el hombre se declaró inocente.
Interrogado por la policía, dijo: “No me acuerdo para nada (del incidente en el bar)”.
“Mi memoria se fue desde la mitad de mi estadía en otro izakaya”, añadió. (International Press)
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