El 7 de enero, Keiko Izawa, una mujer de 33 años, mató a su hijo de mayor (Yusei, de 4) en su casa en la ciudad de Utsunomiya, prefectura de Tochigi.
Luego se acuchilló en el abdomen para quitarse la vida.
La mujer, inconsciente y en estado crítico, fue hospitalizada.
Tras recuperarse y ser dada de alta fue arrestada por la policía, informa el sitio News On Japan.
“Estrangulé a Yusei hasta la muerte e intenté suicidarme, pero no pude morir”, declaró a la policía.
La policía está investigando si también fue la responsable de la muerte de su hijo menor (Seisho, de 2).
El padre de los dos niños y pareja de la mujer no estaba presente en el momento de los ataques. Cuando regresó a casa encontró a los tres inconscientes.
La mujer tenía un cuchillo incrustado en el abdomen.
El caso ha generado preocupación sobre los problemas de salud mental en las familias en Japón, según la estación ANN News.
Se necesita más apoyo a los padres con dificultades para criar a sus hijos y una mayor conciencia sobre la salud mental. (International Press)
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