En 2022 el Ministerio de Trabajo de Japón inspeccionó in situ a 9.829 empresas con aprendices extranjeros que aparentemente no cumplían con la ley.
La investigación detectó que 7.247 de ellas habían violado las normas legales, informa Kyodo.
La infracción más común (el 23,7 % del total) fue el no cumplimiento de los estándares de seguridad.
En un caso, por ejemplo, se descubrió que un aprendiz extranjero usaba una grúa para levantar cargas de más de una tonelada, a pesar de que no había completado el curso de capacitación requerido.
La segunda infracción más común (el 16,9 %) fue el no pago de salarios.
Una empresa obligó a cuatro aprendices extranjeros a trabajar más de 100 horas extras al mes, algo ilegal.
El ministerio trasladó 21 casos considerados como graves a los fiscales.
A fines de 2022, Japón tenía alrededor de 325.000 aprendices extranjeros.
Si bien el programa nació con el fin de transferir conocimientos y habilidades laborales a los aprendices para que después los vuelquen en sus países de origen, en la práctica se ha convertido en fuente de mano de obra barata y explotación.
Por ello, en abril un panel del gobierno japonés propuso eliminar el sistema y crear otro en su lugar. (International Press)