El 20 de agosto, un tren de JR East partió de la estación de Koriyama, en la prefectura de Fukushima, a las 6:18 p. m. Tres minutos después, el conductor tomó su tablet para consultar el horario del vehículo, pero no pudo utilizarlo porque había olvidado la contraseña. Todo sus intentos fueron rechazados.
En cada estación en la que el tren se detuvo antes de llegar a su destino final, el conductor verificó repetidamente el horario, lo cual originó un retraso total de 23 minutos.
Este incidente, revela el portal SoraNews24, no fue el único. En julio, un conductor se preparaba para salir de la estación de Ishinomaki, en la prefectura de Miyagi, cuando fue a consultar el horario en su tableta. Como había olvidado la contraseña no pudo desbloquearlo.
¿Qué hizo? Esperar en la estación a que alguien pudiera darle una copia en papel del horario. ¿Consecuencias? Un retraso de 22 minutos y alrededor de 120 pasajeros enfadados.
JR East entrega a sus empleados tabletas donde pueden consultar los horarios de partida y llegada de los trenes, información que se actualiza constantemente.
Para evitar que problemas como los mencionados se repitan, la compañía ferroviaria anunció que profundizará la orientación a sus conductores sobre cómo recordar contraseñas.
Sin embargo, como apunta SoraNews24, más simple sería desbloquear el uso de las tabletas, pues los horarios de trenes no son precisamente secretos de Estado. (International Press)
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