La riqueza promedio de los 97 nuevos miembros de la Cámara de Diputados de Japón que fueron elegidos por primera vez en octubre del año pasado es de 18,64 millones de yenes, unos 150.000 dólares, según la declaración de sus activos hechos públicos hoy.
El índice es menor que los 20,36 millones de los 56 nuevos diputados que llegaron al Congreso en 2017. Y si bien hay tres legisladores que tienen activos por 100 millones de yenes, unos 800.000 dólares, o más, incluidos activos financieros que excluyen acciones y bienes raíces, alrededor de una cuarta parte de ellos tiene «cero activos».
El diputado Kenta Fujimaki del derechista partido Nippon Ishin no Kai, que llegó por Kanto Sur, y cuyo padre es un ex senador, destacó con 428,97 millones de yenes en activos, unos 3,5 millones de dólares. Entre los 465 parlamentarios ocupa el cuarto lugar en riqueza personal.
En segundo más rico entre los nuevos parlamentarios es Yasuhisa Shiozaki, hijo de un prominente miembro del gobernante PLD por Ehime, declaró 150,6 millones de yenes, alrededor de 1,2 millones de dólares.
El actual ministro de Relaciones Exteriores, Yoshimasa Hayashi, quien dejó el Senado para ganar un escaño como diputado por Yamaguchi, tiene activos por 114,13 millones de dólares, unos 914.000 dólares.
El Nikkei dijo que 31 diputados, el 30%, tienen activos entre 10 y 100 millones de yenes y 63, que son el 60%, declararon menos de 10 millones de yenes. De estos, 28 congresistas, un 25%, tienen «cero» activos, fundamentalmente porque no poseen bienes inmuebles o porque tienen menos de 5.000 yenes en activos. (NI/RI/)
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