El 18 de junio de 2020, un trabajador de JR West estaba esperando la llegada de un tren vacío en la estación de Okayama, a cuyo conductor debía relevar.
De pronto, el empleado se dio cuenta de que estaba en el andén equivocado y se dirigió al correcto. Llegó tarde, lo que produjo un retraso de dos minutos en la transferencia entre los conductores: un minuto en la partida del tren y otro en su almacenamiento en el depósito.
JR West decidió recortar 85 yenes (0,75 dólares) el salario del hombre por el retraso, revela el portal SoraNews24.
El empleado, inconforme con la decisión, llevó su caso a la oficina de asuntos laborales de Okayama, que estableció que la demora había sido de un minuto, no de dos.
Así las cosas, el monto del recorte salarial se redujo a 56 yenes (0,49 dólares).
El trabajador, sin embargo, no aceptó la reducción considerando que su error no había acarreado perjuicios para la compañía ni perturbado los horarios de funcionamiento, pues el tren no llevaba pasajeros, y este año presentó una demanda en el Tribunal de Distrito de Okayama.
El hombre busca una compensación de 56 yenes correspondientes al recorte salarial, así como 2,2 millones de yenes (alrededor de 20 mil dólares) adicionales por el daño psicológico causado.
JR West se defiende amparándose en el principio de «no trabajo, no pago»… aunque sea solo un minuto. (International Press)
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