La policía de la ciudad de Romoi, en Hokkaido, arrestó este domingo a una pareja de esposos de 38 y 37 años por una denuncia de abuso infantil cometido en 2016 contra sus hijos, una niña de 9 años en ese tiempo, y un varón de 7 años. Los menores fueron enviados a un orfanato con signos visibles de golpes en la cabeza y quemaduras graves en el cuerpo.
La policía investiga al padre y a su esposa, la madrastra de los niños, por hechos ocurridos en febrero de 2016. Desde ese tiempo hasta diciembre de 2020, las autoridades tomaron el testimonio de la hija mayor en varias oportunidades sobre las agresiones de las que fueron víctima.
Los abusos se conocieron el 28 de febrero de 2016 cuando el hijo menor fue trasladado al hospital y su hermana se quejó por ciertos dolores. Se confirmó que ambos tenían graves quemaduras en la espalda y las extremidades, además de cortes en la cabeza.
Los padres dieron su manifestación de manera voluntaria diciendo que los chicos resultaron heridos “mientras jugaban” y que se quemaron mientras “tomaban el baño”.
La investigación concluyó que los daños no ocurrieron de manera accidental sino por golpes y vertido de agua hirviendo de manera intencional.
La policía dijo que en un principio la niña no señaló a su padre ni a su madrastra como responsables de los abusos, pero gradualmente comenzó a dar un testimonio más directo sobre los hechos. Tras las últimas manifestaciones y las pruebas periciales se procedió a la detención de la pareja.
En el caso de abuso infantil tanto la fiscalía, la policía y los centros de orientación infantil tienen un mecanismo de cooperación para escuchar sus testimonios sin recargar a los niños tanto como sea posible. (International Press)
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