El gobierno de Japón ofrece un subsidio de un millón de yenes (9.500 dólares) a propietarios de empresas que han sufrido una pérdida de sus ingresos debido a la pandemia de coronavirus.
La policía de la prefectura de Osaka arrestó a un hombre de 43 años por aprovecharse de manera ilegal de este beneficio.
El sujeto, identificado como Makoto Hirakawa, creó una red integrada por su esposa Aki, de 33 años, y otras dos mujeres, según Tokyo Reporter.
Los Hirakawa, con la complicidad de amas de casa, reclutaron a alrededor de 250 personas para pedir la ayuda pública (utilizaban las redes sociales para ello).
Del millón de yenes, cada cómplice recibía 300.000 yenes (2.850 dólares). Los 700.000 yenes (6.650 dólares) restantes iban para los organizadores.
La policía planea acusar también a las amas de casa. Una de ellas admitió su delito y se excusó diciendo que tenía problemas de dinero. Se sumó a la red de estafas a través de una amiga. (International Press)
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