El 16 de febrero se reunieron miembros del gabinete del gobierno del primer ministro Shinzo Abe en su oficina para discutir sobre el brote del nuevo coronavirus.
El ministro de Medio Ambiente, Shinjiro Koizumi, no asistió a la reunión y en su lugar envió a su secretario.
Koizumi ha sido blanco de fuertes críticas por eludir la reunión para asistir a una fiesta de Año Nuevo con sus partidarios, informó Asahi Shimbun.
Durante una sesión en la Cámara Baja, Toru Miyamoto, legislador del Partido Comunista de Japón, le preguntó a Koizumi si había declinado participar en el encuentro realizado en la oficina del primer ministro para asistir a la fiesta. El ministro admitió su inasistencia.
Koizumi intentó justificarse diciendo que su ausencia no tendría ningún efecto en las medidas gubernamentales para lidiar con la propagación del virus. El ministro evitó referirse a la fiesta.
Durante los cinco minutos de la sesión de preguntas y respuestas en la Dieta, Koizumi dijo seis veces: «Somos meticulosos en nuestro manejo de la crisis».
Cuando los periodistas le preguntaron por el tema después de la sesión dijo exactamente lo mismo.
Jun Azumi, legislador del opositor Partido Democrático Constitucional, dijo que Koizumi «abdicó de sus responsabilidades como ministro del gabinete, y esto podría justificar su renuncia».
Koizumi “bebió y estaba sonriendo en las fotos después de eludir la reunión más importante”, dijo Azumi en alusión a la reunión en la oficina de Abe. (International Press)
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