Durante la madrugada de ese día, el brasileño llegó al koban y comenzó a gritarle a un policía. Acto seguido, le arrojó una silla y lo golpeó en la cabeza.
El policía, con ayuda de un colega, logró maniatar al hombre. Lo sujetaron del torso y las piernas, pero el brasileño, de pronto, perdió el conocimiento. Fue trasladado a un hospital, donde se certificó su fallecimiento.
Los dos policías fueron acusados por negligencia causante de muerte. Sin embargo, no serán procesados, revela Tokyo Reporter.
No se ha hecho pública la razón por la cual la fiscalía de Yokohama ha decidido no enjuiciarlos.
Una autopsia señaló que el hombre murió por asfixia. (International Press)
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