Japón se pone más estricto con las escuelas de idioma japonés que funcionan en su territorio.
La Agencia de Servicios de Inmigración endurecerá sus normas a partir del 1 de septiembre, informó Jiji Press.
El 70 % o más de los alumnos de las escuelas de idioma japonés que completen sus estudios en ellas deberán, como paso siguiente, estudiar en una universidad, conseguir un trabajo en Japón o certificar mediante exámenes externos que su dominio del idioma japonés está por encima del nivel de una conversación cotidiana.
Las escuelas que no cumplan con estos requerimientos durante tres años consecutivos no podrán recibir a estudiantes extranjeros.
La medida busca dos cosas: primero, evitar que ingresen al país extranjeros con visa de estudiante cuyo verdadero objetivo es trabajar en Japón, y segundo, mejorar la calidad de la educación en idioma japonés. (International Press)
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