Hace un año, Naomi Osaka tenía cuatro patrocinadores. Hoy tiene ocho. Un mundo de cosas pasó entre una etapa y otra.
Después, el mes pasado, ganó su segundo Grand Slam en Australia y ahora es la número uno del mundo, la primera persona nacida en Asia en lograrlo.
Antes de comenzar a hacer historia, Naomi tenía el patrocinio del fabricante de alimentos Nissin, Adidas, el fabricante de artículos deportivos Yonex y la emisora de TV Wowow.
A ellos se han sumado cuatro grandes compañías japonesas: Citizen Watch Co., Nissan, Shiseido y All Nippon Airways, revela Mainichi Shimbun.
Naomi ha sido nombrada embajadora de Nissan y pronto se anunciará su participación en un comercial.
El gigante del motor ha producido un coche deportivo GT-R, «modelo Naomi Osaka», que se puede reservar desde fines del año pasado. El modelo ha sido un éxito, pues se ha superado la meta de 50 unidades vendidas y hay una lista de espera para comprarlo.
El “efecto Naomi” tiene un efecto positivo en la marca japonesa desde su triunfo en Estados Unidos.
Nissan espera, según Mainichi, que Naomi ayude a disipar la imagen negativa que arrastra desde el arresto de su expresidente Carlos Ghosn.
Quienes demostraron tener buen ojo fueron los de Yonex, que patrocinan a Naomi desde 2014. Gracias a los éxitos de la campeona, el fabricante japonés está firmando más contratos con jóvenes tenistas. (International Press)
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