Las protestas contra las obras de construcción de una base militar de Estados Unidos en la ciudad de Nago, Okinawa, llegaron hasta la Casa Blanca.
Un grupo de alrededor de 30 activistas japoneses y estadounidenses organizaron un mitin el lunes frente a la Casa Blanca para exigir al presidente Donald Trump el cese de los trabajos, informó Kyodo.
Los manifestantes exhibían pancartas con frases como: «¡Pare! Base de guerra de Estados Unidos, Henoko, Okinawa», «Presidente Trump: ¡Por favor, respóndanos!» y «Respeta la democracia de Okinawa».
El hawaiano destacó el elevado número de firmas que ha logrado recoger, pese a “la falta total de cobertura de los medios de Estados Unidos, así como a la fuerte censura que hemos experimentado del primer ministro japonés, Shinzo Abe».
«Te muestra cuántas personas quieren proteger el mar en Henoko y los derechos democráticos del pueblo de Okinawa», afirmó.
Kujiwara, de ancestros okinawenses, pidió que el trabajo se detenga temporalmente, al menos hasta que el pueblo de Okinawa se exprese sobre la construcción de la base en un referéndum convocado por el gobierno okinawense para el 24 de febrero.
El hombre ha enviado mensajes a Trump, el vicepresidente Mike Pence, el secretario de Estado Mike Pompeo, así como a cien senadores. El nikkei dijo que aunque no reciban la respuesta que esperan, “no vamos a rendirnos y vamos a seguir intentándolo».
Aunque Okinawa solo representa el 0,6 % de la superficie total de Japón, alberga alrededor del 70 % de las instalaciones militares estadounidenses en el país asiático. (International Press)
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