El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, tiene previsto visitar Pyongyang el martes 18 para reunirse con el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un.
Se espera que Moon inste nuevamente a Kim a sostener conversaciones directas con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, para resolver los problemas que dividen a los dos países, informó Asahi Shimbun.
La primera vez que Moon y Kim se vieron las caras en abril, el primero le solicitó al segundo que se reuniera con Abe.
El primer ministro japonés ha expresado en varias oportunidades su intención de encontrarse con Kim para buscar una solución al problema de los japoneses secuestrados por Corea del Norte en las décadas de 1970 y 1980. Abe no ha encontrado reciprocidad.
Corea del Sur considera que un diálogo directo entre Japón y Corea del Norte contribuiría a aliviar el clima de tensión en la región y las sanciones económicas que la comunidad internacional ha impuesto a Pyongyang.
Asahi, citando una fuerte cercana a las relaciones entre las dos Coreas, reveló que el 5 septiembre, durante una reunión en Pyongyang, Suh Hoon, director del Servicio de Inteligencia Nacional de Corea del Sur, les dijo a funcionarios norcoreanos que temas como el del secuestro solo se resolverán a través de negociaciones directas entre Japón y Corea del Norte.
Cinco días después, Suh se reunió con Abe en Tokio y le transmitió un mensaje similar. Abe dijo que estaba preparado para reunirse con Kim.
Sin embargo, los funcionarios norcoreanos que dialogaron con Suh dijeron que aunque es necesaria una cumbre entre Japón y Corea del Norte, aún no es el momento de realizarla.
En la agenda bilateral, Japón no solo incluiría el asunto de los secuestros, sino también la desnuclearización de Corea del Norte. No obstante, hay un tema que para este país tiene una gran importancia y que Japón al parecer ha obviado: la dominación colonial de la península coreana por parte del imperio japonés (1910-45). (International Press)
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