El martes, el conductor de un shinkansen que se dirigía hacia a Tokio sintió un ruido inusual debajo del piso del primer vagón.
El tren, operado por la compañía West Japan Railway, se detuvo en la estación de Himeji, prefectura de Hyogo, después de que dos inspectores que habían subido en la estación de Okayama confirmaron la existencia del ruido.
La inspección en Himeji no halló ninguna anomalía, pero por precaución los aproximadamente 800 pasajeros fueron transferidos a otro tren, informó la agencia Kyodo.
JR West está investigando la causa del ruido.
Pese a detectarse la anomalía, el tren siguió operando durante unas cuatro horas. (International Press)
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