El 6 de octubre, en una escuela de primaria en la ciudad de Toyohashi, prefectura de Aichi, un profesor tomó de la cabeza a una estudiante que no había respondido de manera correcta una pregunta sobre matemáticas y golpeó su rostro contra una pizarra varias veces mientras le decía que mirase “de cerca” lo que estaba escrito en ella.
El abuso recién se hizo público el 30 de ese mes, cuando los padres acudieron a la escuela para reportar el hecho. La niña no asiste a clases desde entonces.
El caso reseñado no fue una excepción. Al menos cinco estudiantes han sido víctimas de la violencia de este profesor en la cuarentena cuyo nombre no se ha hecho público, según el sitio SoraNews24.
El profesor golpeaba a sus estudiantes en la cabeza con unas reglas o pellizcaba sus mejillas. El sujeto intentó justificarse diciendo: «Aún después de explicarles las cosas una y otra vez ellos no entendían, así que me enfadaba».
Peor aún, el profesor tenía antecedentes de violencia. Hace dos años, empujó fuera del aula a un niño que no estaba prestando atención en clases. El estudiante cayó al piso y se rompió una muñeca.
El asunto no trascendió porque la escuela explicó la situación a los padres del niño y el profesor se disculpó. La agresión fue reportada ante la junta educativa local como un “accidente”.
La junta educativa se ha disculpado por la agresión a la niña del caso mencionado al principio, pero se desconoce el futuro del profesor. No hay mucho que pensar: un hombre así no puede volver a enseñar. (International Press)
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