Un gran biombo de Star Wars fue presentado el martes en la ciudad japonesa de Uji, en el centro del país y próxima a Kioto, en un acto para promocionar el próximo estreno de la última película de la saga, que contó con la presencia de su director, Rian Johnson.
El biombo, de 1,7 metros de alto y 3,3 de ancho, fue instalado en el templo budista Byodo-in, situado a unos 20 kilómetros al sur de Kioto y declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, de cara al estreno mundial el próximo 15 de diciembre del filme «Star Wars: Los últimos Jedi» (Episode VIII The Last Jedi).
La pintura realizada en tinta negra representa a los carismáticos robots R2-D2 y C-3PO y al malvado por antonomasia de la tercera trilogía de la serie, Kylo Ren, cuyo sable láser rojo es el único elemento que rompe la armonía bicolor del biombo.
El dibujo es obra de Masayuki Kojo, de 39 años, un pintor local que se ganó los halagos del director del nuevo filme de la saga cinematográfica, todo un «western» de samuráis en el espacio que no esconde la fascinación del joven George Lucas que engendró este mito del cine a finales de los años 70.
«Es de una belleza increíble. Siento (al verlo) la conexión entre el estilo de ‘Star Wars’ y la cultura y el sentido estético de Japón», en los que se inspiró la franquicia de Lucasfilm y Disney, dijo Johnson durante la ceremonia de presentación.
En el acto, que la lluvia no consiguió cancelar, Johnson estuvo acompañado por un hombre enfundado en la vestimenta de Kylo Ren y dos Stormtrooper, además de varias personalidades televisivas de Japón.
El biombo permanecerá expuesto en el centro turístico de Uji hasta el 1 de octubre. (EFE)
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