Japón sufre una doble escasez: de trabajadores y de guarderías. El sector de servicios está teniendo dificultades para reclutar personal, así que compañías como la que opera la cadena de tiendas de conveniencia 7-Eleven ha decidido abrir dos guarderías para los hijos de sus empleados, informó el diario Nikkei.
Con esta medida espera atraer a más madres para que se incorporen a su fuerza laboral y retener a las que ya forman parte de ella.
La primera guardería será abierta en septiembre en Tokio y la segunda en Hiroshima en octubre. Aceptarán niños de hasta dos años.
La de Tokio tendrá una capacidad para 30 niños, mientras que la de Hiroshima podrá recibir a 19.
¿Dónde funcionarán? En el segundo piso de locales de 7-Eleven ya existentes. ¿Horario? De 8 a. m. a 8 p. m. ¿Precios? Aún no están definidos, pero serán más baratos que los de las guarderías comunes. Eso será posible gracias a aportes del gobierno y de la misma compañía.
Es posible que también acepten a niños de la zona que no sean hijos de trabajadores.
Si las cosas marchan bien, se abrirán otros guarderías.
Un alto directivo de la compañía admitió que están teniendo dificultades para conseguir empleados. Aunque por lo general las konbini reclutan a jóvenes, ante la escasez de personal están contratando a cada vez más mujeres y ancianos. (International Press)
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