La selección japonesa perdió la oportunidad de encarrilar de manera casi definitiva su clasificación para el Mundial de Rusia 2018, tras ser incapaz de pasar del empate (1-1) ante Irak en el encuentro disputado en Teherán.
Una falta de entendimiento a los 73 minutos entre el central del Southampton inglés Maya Yoshida y el guardameta Eiji Kawashima, que no desaprovechó el centrocampista local Mahdi Kamil, condenó a los japoneses a una igualada (1-1), en un choque en el que los «samurais azules» se adelantaron en el marcador a los 28 minutos con un gol de cabeza de Yuya Osako.
Resultado que permitió a los del bosnio Vahid Halilhodzic recuperar la primera posición del grupo B de la fase de clasificación asiática, aunque con sólo un punto de ventaja sobre Arabia Saudí y Australia.
Precisamente australianos y saudíes serán los dos próximos rivales de Japón, que recibirá a los oceánicos el próximo 31 de agosto y visitará a los saudíes el 5 de septiembre, en dos encuentros en los que a Japón le bastaría con una victoria para asegurarse el billete mundialista.
Un Mundial de Rusia del que este martes se despidió definitivamente Emiratos Árabes Unidos, tras perder cualquier posibilidad de acceder a la repesca, tras empatar este martes 1-1 en su visita a Tailandia. Repesca con la que todavía sueña Siria, tras empatar este martes 2-2 con China, dirigida el italiano Marcelo Lippi, gracias a un gol de Ahmad Al Saleh en el tiempo de prolongación.
Por su parte, Corea del Sur intentará dar esta noche un paso decisivo hacia el Mundial con una victoria en su visita a Catar, que dejaría a los de Uli Stielike a tan sólo un triunfo de la clasificación para la fase final de la Copa del Mundo, en la que ya se aseguró su presencia Irán, tras vencer el lunes por 2-0 a Uzbekistán. EFE
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