La Bolsa de Tokio volvió a subir el jueves animada por las expectativas sobre una inminente subida de tipos en Estados Unidos y por las medidas de estímulo económico anunciadas por el presidente de este país, Donald Trump.
El índice Nikkei cerró con un avance de 171,26 puntos, un 0,88 por ciento, y quedó en 19.564,80 unidades, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, ganó 11,60 puntos, un 0,75 por ciento, hasta 1.564,69 unidades.
El parqué tokiota extendió así sus firmes ganancias de la víspera y alcanzó su máximo de los últimos dos meses, después de llegar a tocar los 19.624,96 puntos durante el primer tramo de negociación, su mejor nivel desde finales de diciembre de 2015.
Al efecto positivo de Trump y su buena acogida en la Bolsa de Nueva York, donde también se registraron ganancias en la víspera, se añadieron las «crecientes expectativas» sobre una subida de tipos en EE.UU. en marzo, destacó el analista Toshikazu Horiuchi, de IwaiCosmo Securities Co., en declaraciones a la agencia local Kyodo.
Varios altos cargos de la Reserva Federal (Fed) han argumentado la conveniencia de una subida de tipos, lo que ha disparado la probabilidad de que se produzca en la reunión del organismo de este mes.
El martes, en el primer discurso de Trump ante una sesión conjunta del Congreso, el presidente estadounidense anunció inversiones multimillonarias en infraestructuras, lo que permitirá crear «millones de nuevos empleos», así como de hacer una «histórica reforma» en materia fiscal.
El sector de los metales no ferrosos fue uno de los más beneficiados de la jornada, ante las perspectivas de proveer de materias primas a las futuras grandes obras en la primera economía mundial.
Destacan las subidas de Mitsubishi Materials, que ganó un 3,0 por ciento, y de Sumitomo Metal Mining, que avanzó un 2,6 por ciento.
En la primera sección, 1.457 valores avanzaron frente a los 421 que retrocedieron, frente a los 124 que terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,532 billones de yenes (21.048 millones de euros), por encima de los 2,389 billones de yenes (19.966 millones de euros) de la víspera. (EFE)
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