La yakuza cree que será una de las grandes beneficiadas con la legalización de los casinos en Japón. El crimen quiere su tajada del gran pastel.
Un líder mafioso, en declaraciones que recoge Asahi Shimbun, dice que «nadie gana grandes beneficios a través del juego, pero los clientes que pierden la razón piden prestadas cantidades ilimitadas de dinero».
Su objetivo son los ludópatas.
El hombre presta dinero a intereses desmesurados a deudores que lo despilfarran en el juego.
El mafioso explica que con la legalización de los casinos, más personas se volverán adictas, adicción que aprovechará gente como él llevándose al bolsillo grandes cantidades de dinero.
El dinero sucio del crimen oganizado puede ser fácilmente lavado en los casinos, dice. Compran un montón de fichas, usan un pequeño número para jugar y el resto lo transforman en dinero limpio.
Un antiguo yakuza experto en la industria del juego afirma que los sindicatos del crimen organizado se están preparando para formar empresas para suministrar de ruletas y máquinas tragamonedas, entre otros equipos, a los casinos.
¿Otra fuente de ingresos? Otro yakuza explica a Asahi que él ha recibido dinero de casinos en el extranjeros como “recompensa” por llevarles clientes. En Japón podría ocurrir lo mismo. (International Press)
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