Se cumple un año de la desaparición de un periodista japonés en Siria

Grupo que lo mantiene secuestrado lo entregaría al Estado Islámico

Hoy se cumple un año de la desaparición del periodista japonés Jumpei Yasuda en Siria, donde se cree que permanece secuestrado por el grupo yihadista Frente Al Nusra, vinculado a Al Qaeda.

Yasuda fue capturado en un área controlada por esta organización terrorista, horas después de entrar en el territorio sirio desde Turquía con el objetivo de cubrir el asesinato de su colega nipón Kenji Goto, ejecutado en enero de 2015.

La última imagen publicada Yasuda fue difundida el pasado mes de mayo por los medios nipones y en ella se le puede ver a con el pelo largo, barba y vestido con ropa naranja mientras sujeta un cartel que reza «Por favor, ayúdenme. Esta es mi última oportunidad».

La persona que hizo llegar la imagen a los medios aseguró que el periodista «freelance», de 42 años, está secuestrado por el Frente Al Nusra, un grupo vinculado a la organización terrorista Al Qaeda reveló la agencia Kyodo.

Este mediador detalló a final del mes de mayo que el grupo armado que retiene a Yasuda entregará al periodista a la organización yihadista Estado Islámico (EI), que ha decapitado a varios rehenes, si no se producen avances en el plazo de un mes en las negociaciones con el Gobierno japonés para su liberación.

Por su parte, el Ejecutivo nipón señaló entonces que está realizando «todos los esfuerzos posibles para solventar el caso» y no ofreció más detalles «debido a lo delicado del asunto».

El Frente Al Nusra es el mismo grupo armado que mantuvo secuestrados en Siria durante diez meses a los periodistas españoles Antonio Pampliega, José Manuel López y Ángel Sastre, quienes fueron finalmente liberados en mayo.

La difusión del vídeo de la decapitación del periodista Kenji Goto, de 47 años, por el Estado Islámico en enero de 2015 conmocionó a Japón, donde se criticó duramente la gestión del secuestro por parte del Gobierno nipón. (EFE)