Lanza versiones traducidas de sus productos al mismo tiempo que en Japón
La piratería es uno de los problemas más grandes que enfrenta la industria japonesa del manga. Para neutralizarla, las compañías niponas están comenzando a publicar en el extranjero versiones traducidas de sus productos al mismo tiempo que los originales salen en Japón, reveló el diario Nikkei.
De este modo, se reduce el tiempo que debe esperar un fan extranjero desde que se lanza un manga en Japón y se publica su versión traducida, brecha que es aprovechada por los piratas.
Tres sitios web que ofrecen, de manera ilegal, versiones traducidas al inglés de más de diez mil manga son visitados por nueve millones de usuarios al mes, generando 1.200 millones de yenes anuales en ingresos publicitarios.
Los fans que no tienen paciencia para esperar varios meses hasta la salida de las versiones traducidas legales acuden a estos sitios.
Lo sorprendente del caso es que algunas veces las versiones piratas aparecen en el extranjero antes de que los originales salgan a la luz en Japón. Un ejemplo: un grupo de piratas tenía en sus manos una copia de la revista de manga Weekly Shonen Jump una semana antes de su salida en Japón. Tradujeron su contenido en solo dos días y, de ese modo, antes de que la revista apareciera en el mercado su versión en inglés ya estaba disponible.
En China, donde la piratería campea a sus anchas, la editorial japonesa Shueisha Inc. se ha asociado con Tencent Holdings, operador de uno de los portales chinos más grandes, para comercializar versiones electrónicas de once populares manga (entre ellos «One Piece» y «Naruto») a bajos precios.
La firma japonesa apunta a quitarles mercado a los piratas ofreciendo productos baratos y con prontitud.
Por su parte, Kadokawa Group Holdings lanzó en noviembre pasado la última entrega de «Neon Genesis Evangelion», en formato de libro electrónico, en 15 mercados, entre ellos China y Brasil, al mismo tiempo que en Japón.
La estrategia, según Nikkei, está rindiendo frutos en países como Corea del Sur.
La industria del anime también está moviéndose con rapidez para mantener a raya la piratería. La firma estadounidense Crunchyroll (TV Tokyo es uno de sus propietarios) transmite anime en línea por solo 6,55 dólares al mes desde 2009 y ha registrado un incremento importante del número de sus suscriptores, que superan los 200.000. El 80 % de su contenido es nuevo.
Por otro lado, un conglomerado que integran los estudios Toei Animation, Aniplex y Sunrise prevé lanzar pronto un servicio que emitirá versiones en inglés de anime casi al mismo tiempo que en Japón.
El manga y el anime son los componentes de mayor peso de “Cool Japan”, la campaña emprendida por el gobierno nipón para difundir la cultura popular japonesa en el exterior.