Considera que tratado fortalecerá la industria automovilística de ambas partes
El presidente de la Asociación de Fabricantes de Vehículos japonesa (JAMA), Akio Toyoda, mostró hoy su satisfacción por el inicio de las negociaciones para que Japón y la Unión Europea (UE) firmen un tratado de libre comercio (TLC).
En un comunicado, Toyoda se congratuló por el anuncio que Tokio y Bruselas hicieron ayer, que indicó que la primera ronda de conversaciones para la rúbrica del tratado, uno de los más ambiciosos planteados hasta la fecha, tendrá lugar en abril.
El presidente de JAMA afirmó estar convencido de que el TLC «proporcionará una oportunidad crucial para promover aún más la cooperación comercial, industrial y de inversión entre los dos socios, y que por ello conducirá al crecimiento y a la expansión de la industria del automóvil en Japón y Europa».
«La industria automotriz japonesa tiene la intención de hacer, en paralelo a los esfuerzos del gobierno japonés, todo lo que esté en su mano para garantizar el avance del diálogo en el nivel que concierne a esta industria», aseguró Toyoda, que también es presidente de Toyota, el mayor fabricante del país.
Durante las negociaciones se espera que Japón pida que la UE elimine, por ejemplo, el gravamen del 10 por ciento que aplica a los vehículos nipones, una de las principales exportaciones al país asiático.
Por su parte, Bruselas reclamará la abolición de barreras no arancelarias que impone Tokio y que, en el caso de los vehículos europeos, conllevan un proceso costoso y largo -de unos dos meses- para poder superar las aduanas niponas.
Este tipo de limitaciones han despertado los temores de diversos sectores industriales europeos e hicieron que la UE tardase años en aprobar el inicio de negociaciones.
Japón, que en 2012 exportó a la UE bienes por valor de unos 64.000 millones de euros, es el séptimo mayor socio comercial de los veintisiete, mientras que el bloque europeo es el tercero del país asiático.
Según la Comisión Europea (CE), el acuerdo podría aumentar el producto interior bruto (PIB) europeo en un punto porcentual, e incrementar en un tercio las exportaciones a Japón, que el año pasado sumaron unos 55.000 millones de euros. (EFE)