Acusan a país sudamericano de imponer medidas proteccionistas
Japón y Estados Unidos se unieron a la Unión Europea (UE) y plantearon sendos procesos de disputa en la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra Argentina, país al que acusan de imponer restricciones comerciales.
En la línea de lo que ya denunció la Unión Europea en mayo, Tokio y Washington acusan a Buenos Aires de restricciones comerciales a través del sistema de licencias no automáticas para la importación, según informaron fuentes diplomáticas.
Ambos países afirmaron, al plantear consultas con Argentina, que este sistema «restringe la importaciones de bienes y discrimina entre mercancías importadas y domésticas», lo que va en contra de los compromisos del país sudamericano como miembro de la OMC.
Las políticas comerciales argentinas, de acuerdo con los demandantes, «no parecen estar relacionadas con la aplicación de ninguna medida justificada bajo los acuerdos de la OMC».
La solicitud de consultas es el primer paso en el mecanismo de solución de disputas en el marco de la OMC y pone en marcha un proceso que puede demorarse años hasta su solución final.
Se abre ahora un plazo de 60 días para que las partes intenten solucionar sus diferencias, al término del cual, si no hay acuerdo, los demandantes tienen la opción de solicitar en la OMC la constitución de un panel de expertos que arbitre en la disputa.
La queja de Japón y Estados Unidos, al igual que la de Bruselas, tiene que ver con las supuestas medidas proteccionistas que Argentina aplica desde 2008 a la importación de productos como tractores, neumáticos, piezas de recambio, juguetes, calzado, computadoras, papel, artículos para el hogar o textiles.
Esas restricciones, impuestas en forma de licencias para la importación, son denunciadas desde hace años por varios países, que el pasado 30 de marzo emitieron una declaración conjunta en Ginebra acusando a Argentina de dificultar gravemente el libre comercio.
La declaración fue firmada por la UE, Estados Unidos, Japón, Australia, Israel, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Noruega, Panamá, Taiwán, Tailandia y Turquía, que denunciaron el excesivo uso por parte de Buenos Aires de licencias de importación no automática.
Argentina rechaza la acusación y la considera carente de objetividad y motivada políticamente. (EFE)